Seguro
que estamos de acuerdo en que gran parte de nuestros empleados, clientes,
proveedores, etc., pertenecen a lo que se ha denominado la Generación Y
(aquellos jóvenes nacidos entre el año 1980 y el 2000). Dada la coyuntura en la
que estas personas han nacido y se han desarrollado, poseen características
propias que les distinguen totalmente de sus predecesores de la Generación X.
Ellos no están dispuestos a “contribuir” sin más a cambio de una paga y unas
promesas a largo plazo pero SI lo están a muchas otras cosas: a trabajar duro
para llegar a lo más alto de su carrera profesional, a aprender constantemente,
a utilizar en todo momento su creatividad y capacidad innovadora…